GLADYS
ILARREGUI
Poemas
__
La vida
y otros efectos personales
__
saldrá
la mujer a la calle con su teléfono celular
mirando el
otoño, Basho ya no saldrá de su escrituras
en su casa
quieta, no saldrá el sol ámbar transparente
con sus raíces
duras, no habrá cómo decir en ningún
idioma la
vida es perpetua. Eso se reconoce a cierta
edad, ciertas
piezas rotas de un juguete son todavía
más
importantes que lo que está perfectamente en su
lugar. Como
el amor no está en su lugar, como la
vida es un
espejo fuerte y siempre opaco, como un
caligrama
encierra una música precisa que sin embargo
se disuelve,
como un mechón de pelo detrás de la oreja
como una mujer
que corre y toma el metro, como un
hombre de
ojos rasgados que detalladamente mira
el tiempo,
en mis ojos / en las ventanas de una tienda.
Un movimiento
irrepetible surge del atardecer y
oscurece los
pasos. Y el viento dibuja una palabra.
Adentro del
mundo hay un corazón salvaje e inquieto,
pero muchas
veces detenido, cuando se escribe
de frente
a la edad, al peso del tiempo en el mundo
cada silencio
es importante. En cada caída de la mano en
el pincel,
cada vez que se deja algo inconcluso,
hay más
posibilidades de acelerar una verdad sobre
uno mismo.
Como en los trozos de vidrio partidos en la calle,
hay un viaje
único de los objetos a su ciudad oculta.
__
_______________________________Ikebukoro,
2003
__
__
Un corto
viaje alrededor del mundo
__
como un árbol
amarillo salvaje
como una hoja
que hereda su destierro
como el tiempo
podrido y perturbado de los objetos
solos en una
caja oculta en una habitación abandonada
como vasos
partidos, platos heredados, hojas de
partitura
de una canción ajena, todo el espectro
de la imaginación
en la mudanza del otoño, de la mujer
de la mano
que surge cerrando un cajón
para tocar
una lapicera y escribir un rotulo,
una identificación
a esa manera de mirar el mundo.
Como si algo
no se nos escapara de la mano:
la inocencia,
la libertad, las formas del respeto
por esas hojas
viejas por esos árboles acribillados de
sol en el
patio, por esos trayectos de la agonía
a plena luz
entre las ventanas.
Por un amor
uno hace muchas cosas que no tienen
sentido, y
después se reacomoda esa memoria con
cómos
y por qués. En la realidad dos personas
caminaban
en un calle sola. Esa es la historia del
planeta de
la casa de la caja con unos vasos de vidrio
que a contraluz
irradian como espejos.