Martha
Lorena Martínez Montalvo_(México)
“Epitafio”
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Cuando
muera el cuerpo que hoy me viste,
quiero que
haya solo un epitafio.
Dos palabras,
dos vidas, dos despedidas,
dos sollozos,
solo dos.
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Acaso sean
la ofrenda invisible
en que agradezco
al altísimo,
tan venturosa
y azarosa aventura,
tan inconclusa
carrera iniciada cientos de veces.
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Un epitafio
que señale el amor esclavo,
el amor liberador,
el amor ausente.
Que haga las
paces con el caprichoso destino,
con el condescendiente
destino.
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Mi epitafio
serán dos palabras nunca pronunciadas,
ocultas en
mi presa y apasionada luna,
las huellas
denunciantes ocultas en otras huellas
que significaban
un número, una clave.
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Mi epitafio
calmará los ojos que lloren, calmará
la desesperación
de la ausencia anidada en cuerpos,
la nostalgia
de los oídos fieles, lejanos, ocultos,
las espaldas
desnudas ya de mis manos y miradas.
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Mi epitafio
vestirá el sofisticado ropaje de despedida,
en elegante
ademán de dignidad compartida
por quienes
me esperan, amorosos, ansiosos.
Será
moneda seductora, prometedora de paraísos exóticos.
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